Yo he vivido casi toda mi vida en L’Hospitalet y aunque me pese, veo que tendremos que esperar a la siguiente generación (espero) para que algunas cosas cambien.
(foto que tomé en Hospi mientras esperaba que me arreglaran el coche).

Avui he comprat un llibre per internet recomanat per microsiervos.
El tema és que no està editat en espanyol i no és fàcil de trobar offline (al FNAC no el ténen.
Doncs on? a Internet 😉 !!
1.- He mirat a Amazon a USA i a UK. Els gastos d’enviament (uns 10 usd) fan que et resulti més car que el mateix llibre.
2.- He trobat altres webs alternatives, on tant el preu del llibre com el del transport (te l’envíem també desde USA) és la meitat.

El líder marca el preu. El segon li va al darrera i ha de competir en qualitat, servei o PREU.
Pepsi serà sempre més barata al supermercat que la Coca-cola. Fixa-t’hi.

Mismo formato. Mismo medio. Mismo lugar. Mismo público. Misma composición. Misma Posición. Diferente mensaje.

(foto que tomé en el metro de Pl. Universidad, BCN hace unos meses. Drcha: Anuncio de la obra de teatro ‘Plataforma’; Izqda: Anuncio de Lufthansa).

Hay quién dice que a partir de una cierta edad, no importa lo que puedes llegar a hacer sinó lo que has hecho. Sobretodo aplican esta regla los directores de recursos humnanos de las multinacionales al valorar los CV’s de los candidatos. No estoy de acuerdo con este principio. Es como decir que hay una época de la vida para aprender y otra para aplicar lo aprendido. Nada más triste y desalentador.

“¡OIGA! ¿QUIERE UD. HACER EL FAVOR DE HACER LA SOMBRA DE MI SOMBRILLA MÁS GRANDE?”
¿No os habéis fijado lo desplazadas que están algunas personas en algunos contextos diferentes al suyo de cada día? Hay quien fuera de contexto aparece como ridículo, pierde su dignidad, autoestima e incluso identidad. Y simplemente son ridículos. Me río de la falsa seguridad. Odio la arrogancia.

Ankeborg (en sueco, o originalmente Duckburg) es la ciudad del pato Donald. En Suecia, se dice ir a la “moda de Ankeborg” cuando uno viste con camiseta y sin nada que le cubra la parte baja del cuerpo, “bottom-less”, digamos. Como el pato Donald, vamos. Es como algún pillo se habrá imaginado a los presentadores de las notícias de la tele.
Es como puede sentirse quién está intentando tirar adelante una empresa. Debe convencer y dar seguridad cuando está manejando algo altamente inestable y imprevisible. Dar sensación de control cuando no sabes como te irá mañana. Como poner cara de Indiana cuando te hacen la foto en los San Fermines mientras notas el calor del aliento del toro en el trasero (…¿o no es por el toro?…).
Es dar el pego en tu lado público mientras tienes realmente mil dudas en tu interior. Es el arte de gestionar la incertidumbre.