Carles Ferrer es accionista de Nauta Capital, empresa de capital riesgo española con oficinas en Barcelona y en Boston.
Ha tenido la gentileza de pasarse por el SeedRocket, y a parte de conocernos un poco a las empresas presentes EscapadaRural, Monazen y Linkua, nos ha dado una breve explicación de qué es Nauta Capital.
Nauta Capital son 6 socios (algunos de ellos ex Cluster). Gestionan fondos por valor de 65 M €.
Invierten en Europa y en USA, entre 0.5 y 6 M€ por empresa participada. Actualmente tienen 14 empresas participadas (4 en USA, 1 en UK, 9 en España). También hay alguna participada a nivel semilla pero no son mayoría.
Invierten meyormente en sector móviles pero también en seguridad (IT security, identity management). Y han empezado a invertir en comercio electrónico (Privalia).
Nos aconseja identificar a quien tenemos delante: un empleado de una empresa de capital riesgo o a un socio de dicha empresa (que se juega SU dinero).
Aunque ahora, en los tiempos que corren está cambiando el panorama, suelen esperar una TIR del 30% y desinvertir en 5 a 7 años. Comenta que de las tres posibilidades de exit que contemplan (salida a bolsa, tradesale, u otro fondo de inversión) la que está peor hoy en día son las salidas a bolsa (IPO’s): en el 2000, 270 empresas tuvieron ‘exit’ a bolsa en USA, 85 en el 2007 y solo 6 en el 2008.
En internet, invierten en Privalia y se lanzaran en breve en otra inversión. Buscan proyectos globales y con fuerte expansión.
Otra empresa que ha citado es Saytel, empresa dedicada a la encriptación aplicada a la votación electrónica. Tienen ya base en Barcelona,
Washington y Singapur. (Nota: la votación electrónica está prohibida en España por ley, uno de los pocos casos europeos).
Nos ha comentado que Nauta tiene una serie de ‘especialistas’ o los dedican para cubrir un campo estratégico de las empresas participadas. Es decir, no solo aportan capital pero también conocimiento (a cargo de la empresa, claro ;).
¿Qué les piden a una Startup?
– Business Plan con proyección, en un gran mercado. No descartan internet, aunque la diferenciación es difícil (y protegerse con patentes imposible).
– Emprendedores que arriesguen (dinero y tiempo), altamente dedicados e implicados.